Buenos días. Hoy es un lunes más duro de lo habitual, ya que me toca volver a la realidad después de mis mini-vacaciones en Los Alpes.
Hace ya un tiempo que decidí huir de las estaciones de ski masificadas, tipo Andorra (también bautizada como el Benidorm del ski). Para cambiarlas por las estaciones "pequeñas" y la verdad es que tienen bastante encanto.
Hace ya un tiempo que decidí huir de las estaciones de ski masificadas, tipo Andorra (también bautizada como el Benidorm del ski). Para cambiarlas por las estaciones "pequeñas" y la verdad es que tienen bastante encanto.
Este año el destino era Chamrousse, una estación a treinta kilómetros de Grenoble, que ha logrado cautivarnos con sus paisajes. Y es que, no me negareis que las vistas desde el apartamento eran espectaculares.
Pero no solo las vistas son espectaculares, la estación está adaptada a todos los niveles de ski y también cuenta con una piscina y jacuzzi externos. Así que, puedes bañarte a unos 28º C mientras ves nevar. Es una pena que no tenga fotos decentes del jacuzzi.
La edición francesa de Vogue, mi cuaderno de oso panda de Adolfo dominguez y el Libro de Inés de la Fressange (que devoré enseguida) fueron compañeros de viaje para paliar la ausencia de Internet, móvil y televisión.
Algo tan sencillo como tener los labios cortados, me llevó a descubrir el bálsamo reparador de Uriage.(huele mejor que el 8 horas de Elisabeth Arden y el efecto es inmediato). Y como funcionaba tan bien, aproveché la ocasión para probar más productos. Los azules son de la linea reparadora, y los verdes de la matificante ya os contaré.
Espero que os haya gustado y que os animéis a visitar la estación.Si queréis ver más fotos del paisaje de Chamrousse os dejo el link a la galería de Flickr Aquí.
No hay comentarios:
Publicar un comentario